lunes, 17 de octubre de 2016

Reino de Nájera



Como primera entrada de todas quiero hablar sobre el lugar donde vivo situado en la rioja alta y del cual ha recibido parte de mi nombre el blog, pero no quiero hablaros sobre toda la historia de Nájera ni sobre cómo es en la actualidad, si no explicaros cómo se transformó entre 923 y 1076 en el Reino de Nájera-Pamplona.



Todo comenzó en 918 cuándo el rey pamplonés Sancho Garcés I, conquista las tierras fértiles del Ebro desde Miranda hasta Tudela y se las entrega a su hijo García Sánchez, y entre ellas estaba Nájera que recibió la denominación de Reino
En 923 le puso a su hijo en Nájera casa y corte y le asignó como tutor y consejero a su tío Jimeno.
En 924 Abderramán III, el poderoso emir de Córdoba, arrasó Pamplona y se quedan sin Corte Sancho Garcés que un año más tarde, en 925 muere de una enfermedad y le sucede su hijo García Sánchez que ya reinaba en Nájera, ampliando sus territorios hasta Pamplona, denominándose ya Reino de Nájera-Pamplona.
García Sánchez creó una política de repoblación de los nuevos territorios y favoreció con donaciones a los monasterios de la zona, especialmente a San Millán de la Cogolla.
Esta misma política mantiene durante unos años su hijo Sancho Garcés II, pero las campañas de Almanzor le obligaron, al igual que a su hijo García Sánchez II, a pagar tributos a Córdoba.
Sancho III impulsó la ciudad de Nájera, celebrando Cortes, otorgando el fuero de Nájera, favoreciendo las peregrinaciones a Santiago de Compostela, estableciendo albergues y hospitales, y convirtiendo a la ciudad en punto clave del Camino de Santiago.
Tras la muerte de Sancho III se reparte su Imperio entre sus hijos reinando en Nájera García Sánchez III, llamado el de Nájera por haber nacido y estar enterrado aquí. Nájera se convierte en cuna de los reinos de Navarra, Castilla y Aragón.
García el de Nájera extendió sus dominios por la Rioja Baja y fundó el Monasterio de Santa María la Real como sede episcopal,y le dotó de numerosas propiedades. También creó la primera orden entre los reinos cristianos peninsulares. Murió en la batalla de Atapuerca en lucha contra su hermano Fernando I de Castilla, en 1054.
Le sucede Sancho IV que fue asesinado por su hermano Ramón en 1076 y estos acontecimientos desembocan en la división del reino y las tierras quedan anexionadas al Reino de Castilla.

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